El Hospital de Can Ruti, en Badalona (Barcelona), ha registrado cuatro casos de contagio de coronavirus en personas que habían recibido las dos dosis de la vacuna, según ha informado el jefe de enfermedades infecciosas del centro, doctor Bonaventura Clotet.
Se trata de infecciones muy leves, pero con una carga viral muy alta lo que demuestra que una persona inmunizada puede infectarse y contagiar igualmente, según ha destacado Clotet en una entrevista este lunes en RAC1 recogida por Europa Press.
«Una persona inmunizada puede infectarse y contagiar igualmente«, doctor Bonaventura Clotet
«No es serio pensar que cuando estemos vacunados ya habrá pasado todo», ha afirmado el doctor Clotet, que ha indicado que, si la variante sudafricana se va extendiendo, probablemente haya que vacunar más a menudo o adaptar los modelos de vacuna.
«Habrá que revacunar. ¿Cuánto tiempo dura la inmunidad de una vacuna? Al cabo de un año será necesario. En el caso de algunas [variantes del Covid–19] quizás incluso dure menos de un año», ha reflexionado Clotet.
Ha asegurado que, contrariamente a lo que se pueda pensar, la reinfección es un fenómeno común, por lo que «se están desarrollando fármacos muy potentes para tratar a los no vacunados o los vacunados que tengan alguna infección, así como a los reinfectados».
Cuarta ola
El médico ha dado por segura una cuarta ola tras la Semana Santa, especialmente por la variante británica del virus: «Nos tenemos que preparar para un nuevo rebrote. Estoy preocupado porque la variante británica es más infecciosa y cuesta más de eliminar».
Con todo, Clotet se ha mostrado satisfecho con la efectividad de la vacuna contra la cepa británica y ha reivindicado los tests rápidos para evitar contagios: «Si se hicieran, [los infectados] tendrían una probabilidad bajísima de contagiar«.
«¿Por qué estamos tardando tanto a normalizar el uso del test rápido? Es un error no hacerlos. En los restaurantes todo el mundo se tendría que haber hecho un test antes», ha declarado el doctor, que apuesta por extender los cribados masivos.
«La rentabilidad de los test rápidos es muy alta, pero se deben hacer bien. Es necesario que todo el mundo aprenda a hacerlos bien con técnicas más simplificadas que las actuales», ha afirmado Clotet, que pretende que se puedan hacer tests de antígenos en los domicilios.