Unos 120 taxistas se han concentrado este jueves en la avenida Maria Cristina de Barcelona para iniciar, a partir de las 10.00 horas, una marcha lenta hasta el Parlament de Cataluña para protestar contra la vuelta de Uber a la capital catalana. Los taxistas prevén avanzar con una marcha lenta por la Gran Via hasta Via Laietana, donde pararán ante la sede de Foment del Treball, para continuar posteriormente por el paseo de Isabel II y la avenida Marquès de l’Argentera hasta el parque de la Ciutadella, donde se encuentra el Parlament.
La aplicación opera de nuevo en la ciudad desde el pasado martes, cuando puso en marcha una aplicación con la que se pueden contratar taxis y aseguró que ya cuenta con 350 taxistas inscritos. Sin embargo, el portavoz de Élite Taxi Barcelona, Tito Álvarez, ha explicado este jueves que la organización ha realizado 1.500 peticiones de trayecto desde el martes y ninguna ha sido aceptada, por lo que ha calificado a los profesionales que se han inscrito según Uber a la plataforma de «taxistas invisibles».
«Ni legal ni ilegalmente»
Álvarez ha subrayado que los taxistas no quieren la presencia de Uber en Barcelona «ni legal ni ilegalmente» y ha retado a la compañía que demuestre que cuenta con los coches con los que asegura trabajar. Según el portavoz de Élite Taxi, los taxistas no quieren trabajar con Uber, por lo que ha augurado que «se tendrán que ir o seguirán haciendo el ridículo como lo llevan haciendo 48 horas».
Además, Álvarez ha recordado que ya han conseguido que Uber tuviera que dejar de operar en Barcelona dos veces y ha augurado que no se van a cansar: «Nos encanta demostrar a la sociedad que se puede ganar a estas empresas». El líder sindical ha descartado una huelga de taxis como la que mantuvo cortada la Gran Via durante el verano de 2018 y ha apuntado que «todo el mundo puede estar tranquilo».