Mañana, los partidos separatistas registrarán en el Congreso una proposición de ley de amnistía para los presos del procés. Como es sabido, el separatismo prefiere la amnistía al indulto porque la primera medida absuelve completamente al acusado mientras que la segunda perdona la condena pero no el delito. Este asunto ha sido abordado en la entrevista que La Vanguardia ha hecho al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, encarcelado en la prisión de Lledoners.
Así, al ser inquirido al respecto, Cuixart ha mantenido que la «vía judicial está agotada» y la última resolución de revocación del tercer grado «lo demuestra». Y es que para el líder secesionista, la cuestión «no va de nueve presos políticos, sino de resolver un problema político y por eso hace falta la amnistía». «Estamos obligados a presentar una propuesta en el Congreso. No hay otra alternativa de solución global para los represaliados, porque el pitote que hay aquí es muy grande. O hay solución global o [el Estado] no saldrá adelante. Y la amnistía es fundamental para la estabilidad de las negociaciones».
«¡Ojalá juzguen a la Policía!»
Llamativamente, Cuixart no defiende una amnistía que incluya a todos los bandos en liza, tal y como ocurrió en la Transición. De esta forma, aunque Òmnium habla de poner el «contador a cero», su líder rechaza exigir la amnistía también para los agentes de policía investigados o procesados por el 1-O: «¡Ojalá los juzguen!». Y aclara: «La amnistía no quiere decir impunidad. Si han vulnerado el ejercicio de sus propios derechos, que lo paguen. La comunidad internacional dice que hubo abuso de poder. Que sus agresiones quedaran impunes sería de una gravedad absoluta».