La decisión de la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, de poner fin a su alianza con el PP en Murcia debido a la corrupción de los conservadores y gobernar dicha región con el PSOE está provocando movimientos sísmicos en el entorno del partido. Así, mientras exdirigentes naranjas como Carina Mejías o Juan Carlos Girauta —que abandonaron la formación por su tentativa de establecer pactos también con los socialistas— han rechazado este último movimiento, otros como Toni Roldán —que se marchó del partido por la deriva derechista de Rivera— lo han celebrado interpretándolo como un retorno al centro.
Pero, ¿cómo está siendo recibido el viraje en el seno de la formación? De momento, la única voz crítica que se ha alzado contra la moción de censura murciana y sus consecuencias en el tablero político ha sido la de Toni Cantó, portavoz del grupo parlamentario de Ciudadanos en las Cortes Valencianas. «Cualquiera que me conozca puede imaginar qué pienso de la decisión que ha tomado mi partido en Murcia y de las consecuencias que eso acarrea», publicó ayer Cantó en su cuenta de Twitter. Asimismo, el líder naranja aseguró que, al igual que «gran parte de la ejecutiva» no era conocedor de esta decisión. «He pedido una convocatoria urgente para trasladar allí mi opinión», agregó.
Afinidad con Ayuso
El desmarque de Cantó de la dirección nacional del partido se suma a los elogios que en los últimos tiempos ha dedicado el político valenciano a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Y es que, a finales del año pasado, Cantó manifestó la gran afinidad que sentía con la líder conservadora: «Muchas veces me siento muy identificado con cosas que dice». Del mismo modo, recientemente alabó la coalición entre liberales y conservadores que gobernaba la comunidad: «Ojalá más gobiernos autonómicos con la firmeza del de Ayuso y Aguado».
