El respaldo del separatismo catalán al rapero Pablo Hasél, encarcelado por enaltecimiento del terrorismo y desencadenante de los graves disturbios que han tenido lugar estos días en Barcelona, están siendo transversal desde el punto de vista ideológico. No en vano, los líderes de las distintas formaciones secesionistas están desfilando por la prisión de Ponent de Lleida para visitar al cantante. Primero fue la candidata de Junts per Catalunya a la presidencia de la Generalitat, Laura Borràs, quien se referió a Hasél como «otro preso de la (in)Justicia española». A esta visita se le suma ahora la de Albert Botran, diputado de un partido aún más afín que JxCAT a la tesis antisistema de Hasél: la CUP.
«Un buen rato con Pablo Hasel en la cárcel de Lleida. Contento de todas las movilizaciones, especialmente que estén conectando su encarcelamiento con el malestar y las luchas sociales, contra el régimen del 78. ¡Continuad en las calles, hasta liberarlo!», ha sentenciado Botran en su cuenta de Twitter. Junto al texto, ha incorporado una fotografía en la que Hasél aparece carcajeándose.
Una candidata de la CUP reivindicó la quema del furgón policial
No es la primera vez desde que comenzaron los disturbios por Hasél que la CUP muestra su cercanía al rapero encarcelado y su rechazo a la actuación de las Fuerzas del orden en los altercados. No en vano, la número nueve por Barcelona de la formación antisistema, Mar Ampurdanès, reivindicó recientemente en Twitter la quema de un furgón de la GUB con un agente dentro por parpe de radicales. «Nuestra lucha es la lucha de clases. Hasta que caigan», escribió Ampurdanès junto a un fotografía del vehículo en llamas.