El ex presidente y eurodiputado fugado de la Justicia española Carles Puigdemont ha acusado a los jueces de «tener opiniones políticas» y de expresarlas «abiertamente en sus sentencias«. Lo ha hecho en un hilo de mensajes en Twitter en el que, además, afirma que «la persecución política sigue existiendo en España» y que la unidad del Estado y la monarquía son «temas tabú que no se pueden discutir sin correr el riesgo de ser denunciados».
El también líder de JxCat asegura en sus mensajes que existe en España un «problema estructural» en relación al «ejercicio de las libertades fundamentales». En este sentido, pone como ejemplo la última denuncia de la Fiscalía contra el presidente del Parlament, Roger Torrent, y los miembros de la Mesa por «haber autorizado un debate parlamentario sobre el derecho a la autodeterminación y sobre la cuestión de la monarquía«. «Los mismos tabúes que el franquismo«, añade.
Un juez de Falange
En otro mensaje, Puigdemont se apoya en un rótulo de TVE que equiparaba a los constitucionalistas con los nazis para dar veracidad a sus denuncias. Y acaba su listado de ejemplos asegurando que uno de los jueces que han condenado al rapero Pablo Hasél fue candidato «del partido fascista Falange Española en las primeras elecciones constitucionales».