El presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, ha rechazado este jueves la posibilidad de participar en el cordón sanitario que los socialistas pretenden levantar contra los 11 diputados de Vox en el Parlament. «No participaremos de ningún cordón sanitario a nadie», ha escrito en su cuenta de Twitter Fernández, «el límite lo pone la Ley de Partidos«.
El popular, que volverá ser diputado en la legislatura que comenzará el próximo 12 de marzo, ha basado su rechazo a la propuesta del PSC en lo que ha llamado la «hipocresía del PSOE«. Y ha recordado con una sola frase, «salvo cuando Sánchez necesite sus votos en el Congreso», cómo el PSOE rubricó un acuerdo similar en la Cámara baja para, posteriormente, sacar adelante gracias a Vox la gestión de los fondos europeos.
El cordón sanitario rechazado por el PP en Cataluña es una propuesta del PSC que tiene como finalidad ignorar la actividad parlamentaria del grupo que liderará Ignacio Garriga. Su objetivo es «cerrar el paso a la extrema derecha en las posiciones institucionales del Parlament, siempre que sea posible». Hasta ahora, el PSC nunca había actuado de manera similar. Ni siquiera cuando los separatistas pusieron en jaque la Constitución en Cataluña mediante la aprobación de las leyes de transitoriedad, que muchos expertos han calificado de «populismo autoritario«.