La plataforma Twitter ha suspendido temporalmente la cuenta oficial de Vox por mensajes que incitan al odio. La red social ha decidido «limitar de forma temporal algunas funciones» de la cuenta del partido de extrema derecha.
Twitter acusa a Vox de «amenazar, acosar o fomentar la violencia contra otras personas por motivo de su raza, origen étnico, nacionalidad, orientación sexual, género, identidad de género, religión, edad, discapacidad o enfermedad», por un mensaje del partido con el hashtag #StopIslamizacion.
El líder del partido, Santiago Abascal, ha denunciado la suspensión de Twitter «nos impide lanzar nuestro mensaje y explicar nuestras posturas». El dirigente de extrema derecha tilda la situación de «gravísima» ya que «usurpa las funciones de los Estados democráticos, limitando derechos fundamentales, como ya denuncié, coincidiendo en eso con varios líderes internacionales, de signos muy diferentes».
Abascal, además, asegura que Twitter «está atacando la libertad y la democracia en el momento en que censura a los representantes públicos de millones de españoles». Por todo eso, el líder de Vox ha anunciado una querella «contra esta actuación totalitaria que busca, entre otras cosas, influir en las próximas elecciones catalanas».
Por último, Abascal explica que el tuit que ha motivado el bloqueo «ofrece datos sobre la violencia que sufren los españoles en Cataluña o en las Canarias. Los millonarios tecnológicos no quieren que se conozcan las consecuencias de la invasión migratoria que promueven junto con algunos gobiernos», sentencia el líder de Vox.