Nuevo golpe de efecto en las listas de los partidos catalanes a las elecciones del 14-F. Después de que el Partido Popular fichase a la que era candidata de Ciudadanos hasta el verano, Lorena Roldán, y a la mano derecha de Manuel Valls en el Ayuntamiento de Barcelona, Eva Parera, ahora es la formación naranja la que contraataca con la incorporación a su candidatura de otro nombre estelar: la periodista constitucionalista Anna Grau.
Grau, nacida en Gerona el 21 de septiembre de 1967, se ha singularizado en los últimos tiempos como una de las voces más críticas con el procés y el nacionalismo. Sin embargo, su trayectoria arrancó hace tres década en medios de comunicación catalanes afines al secesionismo, como Catalunya Ràdio el diario Avui, del que llegó a ser delegada en Madrid. Tras ello, ha sido corresponsal de ABC en Nueva York, así como colaboradora en RTVE, Telemadrid, La Sexta, EsRadio, La SER, Onda Cero y Onda Madrid. Asimismo, es columnista en The Objective y The New Barcelona Post. En la actualidad, es presidenta en Madrid de Sociedad Civil Catalana, la entidad constitucionalista que combate cívicamente al separatismo y promueve la convivencia en Cataluña.
Víctima del asedio separatista
Recientemente, Grau ha denunciado públicamente ser víctima de una campaña de acoso y derribo en las redes sociales por parte del secesionismo radical. Éste la ha cubierto de insultos a raíz de una intervención televisiva suya en la que cuestionó con contundencia la exclusión del castellano en las aulas catalanas. Tras el asedio, la periodista ha recibido el respaldo de la Federación de Asociaciones de Prensa de España (FAPE) y de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), así como el apoyo explícito de muchos políticos de Cs, PSC y PP.
Cabe decir que Grau ya se había afiliado a Ciudadanos el 11 de noviembre de 2019, un día después de que la formación naranja se hundiera en las últimas elecciones generales, en las que pasó de 57 diputados en el Congreso a diez, lo que derivó en la dimisión de Albert Rivera como presidente. Antes, ya había mostrado su cercanía al partido participando como asistente o presentadora en algunos de sus actos. Pese a ello, Grau nunca había ostentado ningún cargo en la formación liberal.