Fira de Barcelona cerrará este año con una facturación de 82 millones de euros, lo que supone un 62,72% menos que en 2019, cuando alcanzó los 220 millones de euros de ingresos. Así lo ha explicado este viernes en la rueda de prensa de balance el director general de Fira de Barcelona, Constantí Serrallonga quien también ha anunciado que reactivarán su actividad presencial en primavera.
Serrallonga ha destacado que se trata de un resultado «de equilibrio» que sale del conjunto de eventos físicos y virtuales durante el año y de los servicios prestados y ha asegurado que les sitúa en una posición de salida de cara al año que viene. También ha explicado que el año que viene, que afrontan «con mucha ambición», prevén unos ingresos superiores a los 125 millones de euros.
La institución ferial ha contado este año con una subvención finalista de 10 millones de euros, cinco millones de la Generalitat y cinco del Ayuntamiento de Barcelona, para dar apoyo a unos eventos concretos. Además, Fira de Barcelona solo ha pagado 1,4 millones de euros del canon anual que paga en concepto de cesión de uso de las instalaciones feriales, relativo al uso realizado durante la primera parte del año, lo que ha supuesto dejar de pagar más de seis millones en total durante el actual ejercicio.
Serrallonga ha destacado la importancia de transmitir un mensaje de solvencia ya que compiten con las ferias de todo el mundo y ha explicado que han pasado el año con la intención de minimizar el impacto de la pandemia.
Calendario para 2021
Ha explicado que, de cara a febrero y marzo, puede haber encuentros y congresos pequeños, con el Saló de l’Ensenyament como primera apuesta para mediados de abril, más tarde llegaría el Automobile Barcelona y el Alimentaria (del 17 al 20 de mayo), para luego acoger el ISE, del 1 al 4 de junio, y el Mobile World Congress (MWC), del 28 de junio al 1 de julio.
Durante la rueda de prensa, Serrallonga ha afirmado que han hecho una proyección de eventos lógica con el proceso de desescalada y por la que trabajarán, con una cierta consolidación a finales de junio, y una cierta concentración de la actividad en otoño, con salones como el Smart City Expo World Congress, el Barcelona Building Construmat y el Piscina & Wellness, así como Expoquimia, Barcelona Bridal Fashion Week, Salón Náutico, Caravaning, BizBarcelona, el Salón de la Ocupación y B-Travel.
La institución ferial se hará cargo del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona (CCIB) en noviembre y mantiene «en timing» el proyecto de ampliación del recinto de Gran Via en L’Hospitalet de Llobregat, que pasará de 240.000 metros cuadrados a 300.000. El director general ha sostenido que esta ampliación les situará en una liga superior y que tendrá un rebote en la ciudad de Barcelona: «Habrá una ola de crecimiento y la ferias son instrumentos para que las empresas aprovechen esta ola».
Preguntado por el MWC, que se celebrará en Barcelona hasta el 2024, el presidente del consejo de administración de Fira de Barcelona, Pau Relat, ha sostenido que de momento están centrados en garantizar que la edición de 2021 sea la mejor de las posibles, y ha dicho que desde la GSMA, la entidad organizadora del congreso, están «optimistas».