La portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha avisado este martes de que podrían «ajustar» las medidas previstas para Navidad en función de la evolución de la pandemia del coronavirus, al admitir que necesitan dos o tres días para verificar si hay un cambio de tendencia. En rueda de prensa telemática, ha explicado que, una vez analicen si se ha producido un cambio de tendencia, podrán acabar de definir las medidas en las que se podrá celebrar la Navidad.
«Habrá Navidad, pero según cuáles sean las cifras, se llevará a cabo con unas medidas u otras. No tenemos que aventurar ningún escenario», ha recalcado. Ante el aumento de los casos y de la velocidad de reproducción de la enfermedad (rt), que cree que pueden ser consecuencia del aumento de movilidad y de la interacción social del puente de principios de diciembre.
Tras constatar que los datos no permitieron la semana pasada avanzar de tramo en Cataluña, ha precisado que sí flexibilizaron ciertas restricciones como la apertura de centros comerciales y que, a partir de este fin de semana, el confinamiento municipal pasara a ser comarcal durante los fines de semana.
Por ello, ha llamado a la corresponsabilidad para que las cifras no se disparen y a actuar siendo conscientes de que el incremento de la movilidad y la interacción social derivan en un aumento de casos: «Depende de todos que los datos no aumenten, y que suframos una tercera ola». También ha explicado que, junto con las autoridades sanitarias, estudian si aplicar medidas asimétricas en el territorio y si en algunos casos podrían avanzar de fase.