El ex presidente de la Generalitat Quim Torra no se ha caracterizado nunca por mostrarse comedido en el uso del lenguaje a la hora de definir a sus adversarios ideológicos. Conocidos son los tuits, por ejemplo, en los que llamaba «bestias con forma humana» y una «tara en el ADN» a los catalanes castellanohablantes o «bestezuelas descerebradas» a los votantes de Ciudadanos y PP en Cataluña. Hoy, ha dado una nueva muestra de su radicalismo verbal al tildar de «represor» al Partido Socialista Catalán (PSC).
Lo ha hecho en un tuit en el que muestra su rechazo al pacto entre Junts per Catalunya y el PSC en la Diputación de Barcelona, presidida por la socialista Núria Marín, ya que juzga que el «independentismo no puede pactar con el represor». El ataque de Torra ha tenido lugar después de que Marín declarase este jueves como investigada ante los agentes de la Policía Nacional que indagan una presunta trama de desvío de subvenciones públicas al Consell Esportiu de l’Hospitalet.
«He estado y estoy en contra del pacto de la Diputación de Barcelona y de los pactos con el PSC en ayuntamientos como Sant Cugat, Figueres o Calella. Considero un error permitir la investidura de Pedro Sánchez o aprobar los presupuestos del PSOE. El independentismo no puede pactar con el represor», ha escrito Torra, aludiendo de esta forma a los pactos de JxCAT y ERC con los socialistas en diferentes instituciones.
Un sueldo superior al de Pedro Sánchez
No es la primera vez que Torra habla de «represión» al referirse a las políticas llevadas a cabo por los partidos constitucionalistas. Sin ir más lejos, durante la entrega de la pancarta por la que fue inhabilitado al Museo de Historia de Cataluña la semana pasada, el expresident denunció la presunta «represión que vive Cataluña por parte de los gobiernos españoles». En este sentido, no son pocos los analistas que han advertido la contradicción de que un político que se considera «oprimido» por del Estado español reciba de éste un sueldo como expresidente de 122.400 euros anuales, lo que supone 20.000 euros más de lo que cobra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.