Foment del Treball ha advertido este miércoles de que el cumplimiento estricto de cada uno de los requisitos para la superación gradual de cada una de las fases del fin del confinamiento «hará prácticamente imposible» arrancar la actividad económica en las próximas dos semanas en las principales ciudades.
«Esto será letal para la economía, el conjunto del tejido empresarial y los sectores, en general, más productivos del país», según un comunicado conjunto de la patronal presidida por Josep Sánchez Llibre y de Fepime.
Añade que ser muy estricto y riguroso en cumplir las condiciones e indicadores que autorizan superar cada fase requiere tres actitudes: apelar a la responsabilidad de todo ciudadano, informar con realismo -dice textualmente- de la crítica situación económica y «no descargar toda la solución del problema en la parálisis casi absoluta» de la economía.
Por eso, pide enfocar el esfuerzo en cómo arrancar la economía con seguridad, «y no en cómo pararla«, y reclama información y trabajar con tests masivos pero a la vez fiables.
Sin «posicionamientos políticos»
Foment asegura que plantea estas reivindicaciones haciendo suyas todas las inquietudes del conjunto de sectores económicos de Cataluña, «y con independencia de posicionamientos políticos».
Con estas dos premisas, insiste en la necesidad de arrancar la economía y regresar a la vida laboral «con toda la precaución y responsabilidad».
Margen de decisión de las empresas
También avisa de que el impacto socioeconómico será «muy difícil de asumir y soportar según avancen las semanas» porque cerrarán cada día más empresas, crecerá aún más rápidamente el paro, y la capacidad de muchas familias y empresas para asumir los gastos corrientes se agotará en las próximas semanas.
Foment insiste también en la necesidad de facilitar tests masivos y fiables para todas las empresas «y que éstas puedan tomar decisiones que valoren por igual la productividad y la salud» de sus empleados, proveedores y clientes.