El conseller de Educación de la Generalitat, Josep Bargalló, ha asegura que en los gobiernos de coalición «hay siempre tiranteces» pero ha sostenido que estas tensiones no se llevan a la mesa de Govern.
«En la mesa del Govern en los últimos meses trabajamos solo para la epidemia y le puedo asegurar que no he visto ninguna tirantez», ha insistido el conseller, que ha reiterado que la relación de los partidos está fuera del Govern.
Sobre el pacto del PSOE con Cs para la sexta prórroga del estado de alarma, que también contará con el apoyo de ERC, el conseller ha dicho que el Gobierno central busca apoyos para cuestiones concretas y ha añadido que «eso es la vida política y más en circunstancias como estas».
Vuelta a las escuelas
Respecto a la vuelta a las escuelas de algunos alumnos, Bargalló ha afirmado que el distanciamiento en las escuelas de Cataluña está siendo «fácil» con tan pocos alumnos y ha defendido que las medidas de seguridad para la vuelta a las clases son las que marcan las autoridades sanitarias.
«Si hubiésemos planteado que fuesen todos a la vez, tendríamos que haber puesto medidas más estrictas«, ha señalado el conseller en una entrevista este martes en Ser Catalunya recogida por Europa Press, y ha añadido que la vuelta a las clases está siendo como estaba previsto, con pocos alumnos.
Ha destacado que el retorno está siendo progresivo, con grupos reducidos y tutorías personalizadas, y que «a lo largo de los días, será de un tanto por ciento que no llegará a la mitad», tras lo que ha recordado que es voluntario.
Sobre las críticas de directores de centros educativos, Bargalló ha explicado que los servicios territoriales han hecho entender a las direcciones de los centros que «son un servicio público y tienen que ofrecer servicio a los alumnos que lo necesitan», entre los que ha mencionado a los alumnos que cambian de ciclo.
Reparto de ordenadores
Ha achacado a «dificultades logísticas» la falta de ordenadores a unos 2.000 alumnos en Cataluña para poder seguir asistiendo a clase de manera telemática durante el confinamiento y ha destacado que el Govern ha repartido unos 30.000 y los ayuntamientos, miles.
«Ha habido dificultades logísticas por parte de empresas que lo tenían que hacer», ha apuntado el conseller, y ha añadido que no podrán solventar este problema hasta que no tengan a los alumnos en las clases y puedan saber la situación de cada uno durante el confinamiento.
Ha avisado de que en septiembre «no todos los alumnos podrán entrar a la vez», para lo que ha asegurado que ha hablado con alcaldes para establecer franjas horarias de entrada, y ha dicho que solo podrán entrar a la vez los alumnos de escuelas que tengan tres puertas en tres calles diferentes.
Sobre las críticas dentro del sector educativo, Bargalló ha sostenido que es un colectivo muy grande y con sensibilidades de todo tipo, ha asegurado que forma parte del derecho de los sindicatos pedir su dimisión y ha subrayado: «Hemos elegido la opción que creíamos más válida».