La Lliga Democràtica pide a los partidos de la oposición que promuevan una candidatura «instrumental» que permita «hacer visible la posibilidad de una alternativa política en Cataluña» tras la «irresponsabilidad» del Govern de Torra de no convocar elecciones antes de su inhabilitación para «acelerar la necesaria estabilidad institucional para afrontar la pandemia».
En un comunicado emitido este domingo, la formación catalanista considera que un debate de investidura tendría tres ventajas. Por un lado, permitiría «evidenciar la debilidad de la actual mayoría parlamentaria«; una mayoría que, señalan, ha dejado de existir por «el alejamiento de los diputados de la CUP» y por «la expulsión del gobierno del PDeCat», así como las discrepancias entre JxCat y ERC.
Y por otro, aseguran, permitiría «centrar el debate preelectoral en la necesidad de una acción de gobierno decidida«. Además, también ayudaría a «romper el principal factor de desmovilización de los electores ajenos» al proceso soberanista porque se pondría de manifiesto «el logro de un acuerdo para construir una mayoría alternativa«.
Para el partido liderado por Astrid Barrio el Govern catalán «prefiere nuevamente que las elecciones se celebren por obligación o por accidente en lugar de asumir su irresponsabilidad y haciendo uso de sus atribuciones, convocar las urnas para decidir quién debe gobernar Cataluña, en el entendido de que el propio presidente dio la legislatura por terminada hace nueve meses.» y añade que «esta conducta irresponsable» es la que provocó la aplicación del artículo 155.
Motivo por el cual piden a todos los partidos de la oposición y a las formaciones críticas con las situación actual de Cataluña que «aprovechen» la apertura de consultas por parte del presidente del Parlament, Roger Torrent, y que presenten un candidato que lleve a un debate de investidura. Una propuesta que el partido considera que esta propuesta sería «fácilmente articulable por parte y entorno al PSC».
La formación catalanista es consciente de las posiciones de los partidos de la formación, pero argumenta que es una «solución a la crisis social, a la recuperación del tejido económico y la normalización de la vida institucional».