La casi recién nacida Asociación Nacional de Víctimas y Afectados por Coronavirus (ANVAC) celebrará esta tarde una concentración a las puertas de la Delegación del Gobierno en Barcelona. Lo hará para homenajear a los damnificados por la pandemia del COVID-19 pero también para protestar por la «mala gestión» que está haciendo el Ejecutivo de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias de la crisis sanitaria, económica y social, según ha explicado la delegada de la asociación en Cataluña, Felicity Morera.
La entidad fue creada este verano en Santander y, desde la ciudad cántabra, se ha ido extendiendo por toda España. En estos momentos, y en el caso de Cataluña, cuentan con una delegación en Barcelona pero, según ha explicado Morera a elliberal.cat, esperan abrir en breve en el resto de capitales catalanas. La madre de Morera ha sido una de las víctimas del COVID-19. Paciente de alzheimer, vivía en una residencia privada del Vallés. No tenía síntomas del virus pero sí de una infección renal que, al parecer, no fue convenientemente atendida debido al caos sanitario de aquellos momentos. Cuando llegó al hospital lo hizo ya en un estado del que sería difícil que se recuperara y, finalmente, falleció. En su certificado de defunción, explica su hija, figura la insuficiencia renal pero también el COVID-19.
Morera ya participaba en varios grupos cosiendo mascarillas y creando equipos de protección individual (EPIs) que después se repartieron entre varios centros sanitarios catalanes. El fallecimiento de su madre la sumió en la pena pero, a la vez, le hizo reafirmarse en la necesidad de colaborar. Fue ya en verano cuando contactó con la recién creada asociación, presidida a nivel nacional por Jaime Sánchez, y, desde entonces, no ha parado. Y es que el virus no solo ha puesto de manifiesto la falta de material sanitario sino otras carencias que han llevado a la entidad a crear equipos de asesoramiento en diferentes áreas e, incluso, a repartir comida entre los más afectados.
La justicia como objetivo
Morera subraya en varias ocasiones a lo largo de la conversación que ANVAC es una entidad «apolítica» en la que, en su opinión, deberían implicarse todos los partidos. Pero la asociación tiene claro que es el presidente Sánchez el principal responsable de lo sucedido en España desde que comenzaron a difundirse noticias sobre el virus de Wuhan y su extensión en países como Italia. Por ello el equipo jurídico de la asociación estudia en estos momentos qué acciones legales puede emprender contra el Ejecutivo del PSOE y Unidas Podemos. El objetivo es «que se haga justicia«, afirma convencida Morera, quien lamenta que «ni siquiera quieren reconocer el número real de fallecidos por el COVID-19».
La asociación no está dispuesta a que España en general y los políticos en particular olviden a las víctimas de la pandemia. Y este domingo dieron el campanazo al plantar 53.000 banderas de España en un parque de la M-30 madrileña. Una acción que ha impactado fuertemente en una crisis en la que la publicación de imágenes de ataúdes ha sido duramente criticada. No será, asegura Felicity Morera, la única que llevará a cabo ANVAC para homenajear a los afectados por el COVID-19. Y es que tanto ella como sus compañeros tienen claro que no se puede olvidar a los que consideran víctimas de la «mala gestión del Gobierno». «Si se hubiera actuado antes», lamenta Morera, «si se hubieran puesto los medios, el resultado sería muy diferente. ¿Por qué en un país como Vietnam se han dado solo 1.000 casos y 35 fallecidos y aquí tenemos más de 53.000 muertos?».
Un homenaje al mes
De momento, cada primer jueves de mes ANVAC convocará a sus socios y simpatizantes antes las puertas de todas las delegaciones del Gobierno en España. Este 1 de octubre será el segundo jueves que llevarán a cabo una acción con la que lanzarán un claro mensaje al Gobierno: «No ha sido el virus, sino su tardía y negligente respuesta la que ha provocado las tres cuartas partes de las muertes y el empobrecimiento del país».
La entidad tiene claro que no solo los fallecidos o sus familiares son víctimas de la pandemia y de la gestión política. También consideran víctimas a los ancianos «abandonados en las residencias»; a los sanitarios que han trabajado sin medios y «con una mala planificación»; a los ciudadanos en general, a los que consideran que se ha engañado con «mentiras» y tomando decisiones políticas «sin comité de expertos» y plagadas de «contradicciones y arbitrariedades».
Para ANVAC, los españoles en general han sido víctimas de un estado de alarma que les ha impedido hacer su vida normal. Pero también son víctimas los que debido a la situación se han visto obligados a solicitar ayuda psicológica o a tomar antidepresivos. Y quienes se han visto especialmente afectados por la crisis económica. A todos ellos quiere representar y ayudar esta asociación que, además, tiene como uno de sus objetivos «identificar a los culpables«. «En este teatro», señalaron en su primera concentración, «hay víctimas y todas son inocentes». A todos ellos volverán a homenajear este jueves y así lo seguirán haciendo hasta que logren justicia.