José Raúl Mulino, presidente de la República de Panamá, ha anunciado hoy que su país no renovará su participación en los tratados comerciales pactados con China, marcando así un cambio estratégico en su agenda geopolítica y de comercio internacional. Esta decisión ha sido publicada oficialmente tras la reunión del mandatario panameño con Marco Rubio, Secretario de Estado bajo la administración Trump, dibujando el camino hacía una relación mas estrecha entre el país centroamericano y la nación estadounidense.
🚨BREAKING: Panama’s President has ended the country’s Panama Canal deal with China, immediately following a meeting with U.S. Secretary of State Marco Rubio.
— Benny Johnson (@bennyjohnson) February 2, 2025
Are we tired of winning yet?
pic.twitter.com/sOQJZJJc5E
En el mismo anuncio, Mulino ha asegurado que Panamá mantiene su soberanía plena sobre la vía interoceánica, pero que su gobierno buscará atraer mayores inversiones estadounidenses. Con esto, Panamá revierte el memorando de entendimiento firmado en 2017 con China bajo la administración de Juan Carlos Varela.
Estados Unidos, en pie de guerra contra influencia china
La recuperación de tratos de comercio más favorables con la región panameña en respuesta al avance la influencia china sobre la nación ha sido uno de los puntos más reiterados de la agenda internacional de Trump. El Presidente manifestó en repetidas ocasiones durante la campaña su preocupación por el papel del gigante asiático en el canal, acusando a Beijing de imponer altos costos a los barcos estadounidenses que usan la infrestructura.
The Panama Canal is vital to America’s national and economic security interests.
— Secretary Marco Rubio (@SecRubio) February 3, 2025
We must remain vigilant in protecting this vital asset from the Chinese Communist Party. pic.twitter.com/t06JBNzb66
Marco Rubio, que asumió el cargo de Secretario de Estado tras la victoria del republicano, ha aseverado que no permitirá que China expanda su control sobre la región canalera. En un mensaje en su perfil de X, Rubio ha declarado que «se mantendrá vigilante en la protección de este vital activo contra la influencia del Partido Comunista Chino».
Como parte de esta nueva estrategia, un grupo de legisladores republicanos ha presentado un proyecto de ley para que EE.UU. pueda negociar la recompra del Canal de Panamá. La propuesta, denominada «Ley de Recompra del Canal de Panamá», busca otorgar facultades al presidente estadounidense para iniciar conversaciones con el gobierno panameño con el objetivo de recuperar la gestión de la vía interoceánica.
Un punto estratégico clave
De acuerdo con las estimaciones del Departamento de Estado de EE.UU, más del 70% de los barcos que cruzan el Canal de Panamá tienen como origen o destino puertos estadounidenses. A su vez, en materia de seguridad, la vía es fundamental para el tránsito de barcos de la Guardia Costera y el Departamento de Defensa americano.
Los republicanos que impulsan la recompra del canal destacan que, sin acceso directo a la vía interoceánica, las embarcaciones comerciales y militares de EE.UU. se verían obligadas a recorrer 8.000 millas adicionales alrededor de Sudamérica. El anuncio de Mulino marca por lo tanto un punto de inflexión en la relación de Panamá con China y EE.UU., mientras que la posible recompra del canal por parte de Washington se perfila como un tema central en la agenda política estadounidense y en la geopolítica de la región y sus relaciones con el resto de naciones.
A medida que avanza la discusión, la comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos. Si bien Panamá insiste en su soberanía sobre la vía y parece que las conversaciones empiezan con buen pie, la creciente presión de EE.UU. y el debate sobre la influencia china en América Latina podrían generar nuevas tensiones diplomáticas en los próximos meses, dificultando futuras negociaciones entre países.