La emblemática productora de cava Freixenet ha comunicado su intención de aplicar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectará a un máximo de 180 trabajadores en España, lo que representa aproximadamente el 24% de su plantilla nacional. La medida impactará principalmente a las sociedades Freixenet SA y Segura Viudas SAU, excluyendo a la división comercial del grupo.
La compañía justifica esta decisión por la necesidad de reestructurar sus operaciones de producción, en un contexto marcado por una prolongada sequía que ha reducido la producción de uva en la región del Penedès en un 45% desde 2022. Esta situación ha generado escasez de materia prima y un aumento significativo de los costes, afectando la sostenibilidad operativa de la empresa, según recogen diversos medios.
Freixenet ya había recurrido a un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en 2024, que afectó a 615 empleados, alegando razones similares. Sin embargo, finalmente optó por presentar un ERE por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción, tras agotar la vía temporal.
Diálogo con los sindicatos
La empresa ha asegurado que gestionará el proceso del ERE con sensibilidad hacia los trabajadores afectados, mediante un diálogo abierto con los sindicatos. Además, subraya que esta medida es imprescindible para garantizar la viabilidad operativa y económica a largo plazo, ante la reducción de reservas y el aumento del coste de materias primas.
El sector del cava en general atraviesa momentos complicados, con una caída significativa en las ventas, especialmente en los mercados internacionales. En 2024, las ventas totales de botellas disminuyeron un 13,4% respecto al año anterior, si bien el incremento de precios amortiguó en parte el impacto económico.