Katy Perry junto a cinco mujeres más, han ido al espacio y regresado en un vuelo espacial de 11 minutos, siendo la primera misión tripulada por mujeres desde 1963.
Han sido seis las mujeres que han ido a bordo del cohete New Shepard, de la empresa espacial Blue Origin, propiedad de Jeff Bezos. La pareja del magnate, Lauren Sánchez, ha sido la encargada de liderar la misión, junto a ella se encontraba: la cantante Katy Perry, la periodista y presentadora de CBS Gayle King, la ingeniera aeroespacial Aisha Bowe, la activista Amanda Nguyen y la productora Kerianne Flynn.
El lanzamiento tuvo lugar en Texas, a las ocho y media de la mañana y fue retransmitido por la empresa de transporte aeroespacial. La misión NS-31, alcanzó los 105 kilómetros de altitud y tuvo una duración de aproximadamente diez minutos. El viaje ha sido completamente automatizado, por lo que no ha requerido de pilotos y la tripulación no ha tenido que operar manualmente el vehículo.
Después del aterrizaje, la primera en salir ha sido Lauren Sánchez, quien abrazó a su futuro marido, que la estaba esperando en la puerta del cohete. La segunda ha sido Katy Perry, quien después de bajar las escaleras, beso el suelo y declaró a la prensa: «Me siento muy conectada al amor. Creo que esta experiencia me ha mostrado que no sabes cuánto amor está dentro de ti, cuánto amor tienes que dar y cómo de amada eres hasta el día en que despegas».
En el lugar han estado presentes, figuras públicas como Kris Jenner, Khloé Kardashian y Oprah Winfrey, quienes no han podido evitar llorar de emoción ante la experiencia de estas seis mujeres.
Los trajes espaciales han sido diseñados por Fernando García y Laura Kim de Monse y las astronautas han llevado ropa interior de la marca “SKIMS” de Kim Kardashian.
Esta misión ha destacado por la elección de mujeres con diversos perfiles: del mundo del arte, la ciencia, el periodismo y el activismo; lo que ha otorgado visibilidad del rol femenino en el mundo aeroespacial.
Con esta misión, Blue Origin no solo ha marcado un hito tecnológico, sino también simbólico, al reunir a seis mujeres de distintos ámbitos en un mismo viaje. Han pasado 62 años desde que una tripulación exclusivamente femenina viajó al espacio en 1963. Hoy, esta nueva misión no solo rinde homenaje a aquellas pioneras, sino que también abre una nueva etapa donde la inclusión y la diversidad comienzan a ocupar el lugar que merecen.