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La presunción de inocencia: otro bulo de la fachosfera 

«Ya sabemos que a los socialistas les gusta mangonear en todas las esferas de poder en España, pero atacar a calzón quitado a un alto tribunal me parece sonrojante»

La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero / X.

El nivel de chabacanería intelectual del Gobierno de España es asombroso. La charocracia en la que el PSOE se encuentra cómodo nos está ofreciendo espectáculos absolutamente dantescos. Si dudas sobre estas dos afirmaciones, ponte una alocución de María Jesús Montero. Ya verás cómo no estoy tan desencaminado. 

La última patochada de la vice plenipotenciaria es cepillarse de un plumazo la presunción de inocencia. Bueno, maticemos. De facto ya se la habían cargado, pero es que ella ya ha berreado el ¡caretas fuera! Si defiendes la presunción de inocencia, pilar jurídico de cualquier sistema jurídico en el mundo y de cualquier carta fundamental de derechos humanos, ahora también eres un súper mega facha. Son un grotesco meme con mando en plaza. 

Para ser exactos, y no me acusen a mí de lanzar bulos, María Jesús Montero, literalmente ha calificado de «vergüenza» la sentencia absolutoria del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en el caso de Dani Alves, y ha cuestionado que la presunción de inocencia prevalezca «sobre el testimonio de mujeres jóvenes que denuncian a personas poderosas». Para ella, el mundo ideal sería aquel en el que el simple testimonio de una mujer fuera una sentencia condenatoria. Que el varón tenga derecho a defenderse es una cosa retrógrada y de fachas.

La presunción de inocencia es un derecho fundamental recogido en nuestra Constitución y en los tratados internacionales suscritos por España. Garantiza que ninguna persona sea considerada culpable hasta que se demuestre su responsabilidad penal mediante pruebas suficientes y obtenidas conforme a derecho. Cuestionar este principio básico puede poner en riesgo las garantías procesales y la equidad en los juicios. Una cuestión menor para la vicepresidenta que anda ahora dando coces para intentar echar a Juanma Moreno de Andalucía. Por cierto, sin el “in dubio pro reo”, el hermano y la mujer de Sánchez ya estarían detrás de unos barrotes. 

Creo que, además, no sería mucho pedir que una persona con su responsabilidad pública respetara la independencia judicial. Ya sabemos que a los socialistas les gusta mangonear en todas las esferas de poder en España, pero atacar a calzón quitado a un alto tribunal me parece sonrojante. Es esencial que las instituciones y representantes públicos respeten y respalden la labor de los jueces y magistrados, evitando comentarios que puedan socavar la confianza en nuestro sistema judicial.

Puedo llegar a comprender que personas como la Sra. Montero intenten rascar cuatro votos con el argumento de que la mujer es un ser superior y que su palabra vale mucho más que la de un simple varón. Hay gente para todo. Algunas feministas compran este relato injusto, ilegal, discriminatorio y que degrada la figura del hombre por el simple hecho de ser hombre. Para esta casta feminista desquiciada no harían falta tribunales. Con ver lo que el acusado tiene en la entrepierna ya habría sentencia. 

La charocracia ha perdido el norte. Sólo pueden justificar este tipo de afirmaciones mujeres cargadísimas de rencor, odio y resentimiento. En condiciones normales, desde la serenidad y utilizando sólo un par de neuronas, es imposible que pudieran justificar tales animaladas. Ni siquiera si el acusado es rico y famoso como el ex futbolista (otro de los flancos preferidos de los progres para seguir alimentando su obsesiva compulsión de dividir la sociedad). 

Por cierto, no se pusieron tan exquisitas y feministoides con Monedero y Errejón. Tampoco con el abuso de prostitutas de sus amigos Ábalos y el Tito Berni. Recuerda siempre que para la izquierda nunca es el qué, es el quién. 

Antonio Gallego
Antonio Gallego
Antonio Gallego: Economista. Ha sido diputado en el Congreso y en el Parlament.

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