El proyecto de esta nueva startup de Múnich recaudó más de 350 millones para este lanzamiento de prueba, que no llevaba tripulación. De este modo, Spectrum ha dejado de ser una idea remota de tres estudiantes de ingeniería—Daniel Metzler, Josef Fleischmann y Markus Brandl—para consolidarse como una competidora europea de SpaceX.
Primer lanzamiento
El cohete despegó desde el puerto espacial de Andøya (Noruega). Desde la compañía valoran positivamente el lanzamiento, pues consideran que lograron «recopilar con éxito datos y experiencia valiosos para futuras misiones». Además, destacan que en todo momento el personal de Spectrum permaneció seguro.
A pesar del fallo en esta primera prueba, Isar Aerospace mantiene sus ambiciones intactas. La compañía prevé realizar nuevos lanzamientos en los próximos meses y mejorar la tecnología de Spectrum para competir en el creciente mercado de los satélites comerciales. Con el respaldo de inversores y el apoyo de la Agencia Espacial Europea, la startup alemana se posiciona como un actor clave en la industria aeroespacial del continente.