Rafael Arenas, catedrático de Derecho Internacional Privado en la Universidad Autónoma de Barcelona y vicepresidente de Impulso Ciudadano, ha comparecido en la Comisión de Igualdad del Congreso para abordar la violencia política y sus causas. Durante su intervención, Arenas subrayó la necesidad de erradicar las manifestaciones de odio del debate público, especialmente aquellas que legitiman o incitan ataques contra determinados grupos. En su exposición, denunció episodios violentos dirigidos contra asociaciones estudiantiles, partidos políticos y ciudadanos constitucionalistas, así como la inacción de las autoridades responsables de garantizar el orden público.
Tensión entre representantes políticos
El debate tomó un cariz especialmente tenso cuando, en el turno de réplicas, Rocío de Meer y la portavoz socialista protagonizaron un duro enfrentamiento. En un intento de calmar la situación, Arenas recurrió a una anécdota académica: «Me siento un poco como aquel día en que dos doctores, miembros del tribunal, empezaron a discutir durante la defensa de una tesis, y el doctorando exclamó: ¡Oigan, el que se examina soy yo!». Sin embargo, el catedrático no dejó pasar la oportunidad de recordar a la representante socialista que todas las imágenes que presentó durante su exposición inicial correspondían a hechos ocurridos bajo gobiernos del PSOE. También denunció que «en muchos ayuntamientos de Cataluña gobernados por el Partido Socialista no se cumple la legalidad vigente».
Defensa del plurilingüismo
En cuanto a la discriminación lingüística, Arenas enfatizó que Impulso Ciudadano defiende el plurilingüismo, no el monolingüismo excluyente promovido por el nacionalismo. «En una sociedad bilingüe, debemos poder expresarnos indistintamente en cualquiera de las dos lenguas», afirmó. Finalmente, el catedrático advirtió que la relativa calma actual en Cataluña es el resultado de las constantes cesiones al independentismo, permitiendo su anomalía antidemocrática se normalice sin oposición firme.
