Butch Wilmore y Sunita Williams, dos astronautas estadounidenses de la agencia espacial -NASA-, regresan a la Tierra tras permanecer casi diez meses varados en la Estación Espacial Internacional.
Originalmente, su misión estaba programada para durar solo ocho días como parte de una prueba tripulada, pero fallos en los propulsores y fugas de helio detectados durante el vuelo inicial impidieron que la nave fuera considerada segura para el regreso. La NASA, tras evaluar los riesgos, decidió no utilizar el Starliner para traerlos de vuelta y optó por mantenerlos en la EEI mientras se «buscaba una solución alternativa.»
Una operación polémica
Finalmente, el aterrizaje de vuelta, ejecutado con éxito en el Golfo de América, fue llevado a cabo por SpaceX bajo la dirección de Elon Musk, quien recibió la orden directa del presidente Donald Trump poco después de asumir el cargo. Este retorno no solo supone un logro técnico, sino que ha desencadenado una controversia política sobre las decisiones de la anterior administración Biden.
El conflicto se intensificó en neorme medida cuando Trump acusó al gobierno de Joe Biden de haber «abandonado» a los astronautas por razones políticas, afirmación que respaldó Musk en una entrevista con Sean Hannity en Fox News el 18 de febrero. Según el empresario, SpaceX ofreció traer de vuelta a la tripulación meses antes, pero la propuesta fue rechazada. «Podríamos haberlos traído en pocos meses; su estancia de casi diez meses no tiene sentido», declaró Musk.
El regreso de la misión Crew-9 ha sido ampliamente celebrado en conferencia de prensa conjunta entre SpaceX y la NASA. Joel Montalbano, subdirector asociado de la Dirección de Misiones de Operaciones Espaciales de la NASA, ha evitado pronunciarse sobre las acusaciones vertidas a la anterior administración, limitándose a señalar que la solicitud de el actual presidente ha dado como resultado el aterrizaje exitoso. «No participé en diálogos con la administración anterior; nuestro enfoque fue cumplir con la tarea asignada».
La polémica pone bajo escrutinio la coordinación entre las agencias espaciales y las prioridades políticas en Estados Unidos. Uno de los astronautas rescatados ya ha expresado su creencia en las afirmaciones de Musk sobre la negativa de Biden a organizar un rescate temprano. En una linea similar, Hannity ha instado a la nación a reflexionar sobre el significado de este evento.
