Tezanos vuelve a las andadas. El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha vuelto a desatar polémica al otorgar al PSOE una ventaja de cinco puntos sobre el PP, con un 34,5% frente al 29%, y una caída de Vox al 12,2%. Este resultado, reflejado en un los gráficos que ya circulan por redes, contrasta radicalmente con otras encuestas demoscópicas recientes, que sitúan al bloque de derechas (PP y Vox) liderando con márgenes amplios, incluso superando a los conservadores con 10 puntos de ventaja. La disparidad ha generado escepticismo inmediato en redes sociales, donde usuarios y analistas cuestionan la credibilidad del CIS, apodado ya entre los sectores críticos como “la cocina de Tezanos” por su ya constatada inclinación hacia el PSOE.

Reacciones
Las reacciones en redes sociales han sido, como caía esperar, mayoritariamente críticas, con comentarios que van desde la burla hasta la indignación. Los ciudadanos ironizan sobre las ensoñaciones de Tezanos, mientras otros sugiere con un tono más tajante que «el CIS manipula los datos para favorecer al gobierno de Pedro Sánchez», sacando a relucir la mala fama de Tezanos por su historial de encuestas controvertidas. La percepción de sesgo se refuerza por la caída de Vox, que otras encuestas sitúan con una posición más contundente, y por la estabilidad de Sumar en un 7,6%, lo que muchos consideran poco realista frente al desgaste del bloque progresista.
Este nuevo sondeo no solo reabre el debate sobre la independencia del CIS, sino que también aviva las tensiones políticas en un contexto de alta polarización. Oposición y expertos demoscópicos exigen transparencia en la metodología, recordando que otras firmas como SocioMétrica o GAD3 han mostrado victorias claras del PP en sus estimaciones. La incredulidad hacia Tezanos y su CIS parece consolidarse, alimentando un clima de desconfianza.