El Gobierno de Pedro Sánchez ha intensificado sus esfuerzos para influir en el control de Prisa, el grupo mediático propietario de El País y la Cadena SER. Según informa el semanario francés Le Point, el 12 de febrero se llevó a cabo una reunión en París entre Óscar López, ministro de Transformación Digital, y Marc Murtra, presidente de Telefónica y cercano al presidente Sánchez, con Arnaud de Puyfontaine, CEO de Vivendi, conglomerado francés que posee una participación significativa en Prisa. Durante este encuentro, los representantes españoles habrían instado a Vivendi a vender su participación en Prisa a inversores afines al Gobierno, sugiriendo que, de no hacerlo, podrían reconsiderar la inversión publicitaria de Telefónica en Havas, una filial de Vivendi.
Esta acción se enmarca en una estrategia más amplia del Ejecutivo para reforzar su influencia en los principales medios de comunicación del país, especialmente de cara a las próximas citas electorales. La oposición ha criticado estas maniobras, considerándolas un intento de control gubernamental sobre la prensa y una amenaza a la libertad de información, según recoge Le Point.
Hasta el momento, ni Vivendi ni Prisa han emitido comunicados oficiales al respecto. Se espera que en los próximos días ambas compañías se pronuncien sobre estas informaciones y aclaren su posición ante las presuntas presiones del Gobierno español.
Este episodio añade tensión al ya complejo panorama mediático en España, donde las relaciones entre el poder político y los medios de comunicación están siendo objeto de creciente escrutinio por parte de la sociedad civil y organismos internacionales.
