Gerard Piqué ha comparecido hoy ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Majadahonda como investigado por su papel en el traslado de la Supercopa a Arabia Saudí. Durante su declaración, el exfutbolista ha roto a llorar al hablar del «daño reputacional» que, según él, ha sufrido por este caso. Niega categóricamente haber pagado sobornos a Luis Rubiales, y ha defendido la legalidad de las comisiones millonarias anuales que su empresa, Kosmos, recibió de la empresa saudí SELA. Pese a lo emotivo de su intervención, sus palabras no han convencido a demasiados, con las redes sociales respondiendo con dureza.
Piqué lleva cobrados al menos 1,6 millones en comisiones por la Supercopa de España sólo en lo que llevamos de año. Aporta además pruebas de que intentó vender a Arabia un partido de estrellas con Messi que iba a ser “de puta madre” porque podrían entrar mujeres al estadio. En… pic.twitter.com/xjWLUExifX
— Esteban Urreiztieta (@eurreiztieta) March 13, 2025
Una respuesta contundente
La recepción de la noticia en plataformas digitales ha sido principalmente negativa, con la mayoría de los usuarios acusando a Piqué de victimismo. Los críticos reprochan que sus lágrimas buscan «generar empatía» y desviar la atención de los indicios que, según ellos, lo implicarían en posibles irregularidades. De acuerdo con la acusación, la investigación apunta a un contrato firmado en 2019 entre la RFEF y SELA, donde Kosmos actuó como intermediaria. La Guardia Civil, en un informe de noviembre de 2024, destaca que Piqué fue «parte activa» en las negociaciones, sugiriendo que su rol benefició más a la RFEF que a los saudíes, algo que según su criterio “cuestiona la transparencia del acuerdo”.
Las pruebas concretas presentadas en el caso incluyen 15 facturas emitidas por Kosmos a la Federación de Fútbol de Arabia Saudí (SAAF), entre 2022 y 2025, por un total de 12 millones de euros. Estos documentos han sido presentados por la propia defensa. A su vez, un auto judicial de mayo de 2024 revela que el contrato incluía una cláusula «esencial» que garantizaba los 4 millones anuales a Kosmos, incluso cuando Piqué era jugador activo del Barça, equipo participante en la Supercopa.
La UCO de la Guardia Civil sostiene que esta intermediación pudo encubrir un conflicto de intereses, ya que la RFEF asumió la responsabilidad de asegurar el pago a Kosmos, algo extremadamente inusual.
Hoy por lo que sea, Gerard Piqué no ha hecho sus típicos chascarrillos delante del Juez. https://t.co/7izH6I4T7D
— Bitches Brew (@bitchexbrew) March 14, 2025
Se secó las lagrimas con billetes de 500.
— Monsieur García (@mixelo509) March 14, 2025
Piqué ha vivido tanto tiempo en una burbuja que cuando se enfrenta a la realidad de la vida adulta sufre. https://t.co/JduUT6A9e6
El contraste entre las lágrimas de Piqué y las evidencias documentales ha avivado el debate en redes. Con la discusión aún encendida debido a la polarización que despierta su figura, queda esperar a que la justicia emita su veredicto.