Tomás Guasch cuenta con humor y cierta nostalgia el proyecto de Tabarnia que, en sus propias palabras, petendió emular con un tono sarcástico las reivindicaciones del procés independentista catalán para ponerlo «frente a un espejo».
El periodista lamenta a su vez los estragos sociales causados por el nacionalismo catalán, al que atribuye la pérdida de algunas de sus amistades más antiguas.