Durante la sesión de control al Gobierno, Miguel Tellado, portavoz del Partido Popular, dirigió duras críticas a la vicepresidenta primera, Yolanda Díaz (Sumar). Tellado recordó que sus socios de coalición mantienen bloqueadas diez leyes impulsadas por su formación en esta legislatura. Además, la acusó de guardar silencio ante los casos de corrupción que afectan al Ejecutivo y de enterarse por los medios de comunicación de las decisiones del Gobierno. «Parece usted del Partido Popular, señora Díaz», ironizó el portavoz popular, cuestionando si «realmente vale la pena seguir formando parte de esta mentira». «A Pablo Iglesias esto no se lo harían», concluyó el diputado.
Sra. Díaz,
🔻 El PSOE tiene congeladas sus 10 leyes de esta legislatura, como si fuesen del PP
🔻 Se entera por la prensa de lo que decide el Gobierno
🔻 Y se ve obligada a callarse ante toda la corrupción
🔴 ¿De verdad merece la pena seguir formando parte de esta mentira? pic.twitter.com/IjiXFWGMoI— Miguel Tellado (@Mtelladof) February 19, 2025
UP en un momento dulce
En paralelo, Unidas Podemos también cargó contra Díaz. En una entrevista en Cafè d’Idees (RTVE), Ione Belarra respondió a los intentos de Sumar de recomponer el espacio político a la izquierda del PSOE, asegurando que «se nos expulsó del Gobierno, se nos intentó silenciar en el Congreso en temas como la guerra de Ucrania; en eso consistía la operación Sumar, en silenciar a Podemos». La secretaria general de la formación morada interpretó este acercamiento como un síntoma de una posible convocatoria electoral y dejó claro que su partido no estará «plegado al Partido Socialista».
«Hemos construido, con esfuerzo y cuando muchos nos daban por acabadas, un proyecto político humilde, pero que ha levantado a una izquierda autónoma, no plegada al PSOE y capaz de llevar adelante su programa».
🎥 @ionebelarra pic.twitter.com/ognVOjWqlQ— Podemos (@PODEMOS) February 19, 2025
¿Conseguirán remontar?
Todo este escenario se produce en un momento de fragilidad para Sumar, que pierde apoyo en las encuestas y no ha logrado impulsar reformas de calado que le devuelvan protagonismo político. Mientras tanto, la tensión entre los partidos a la izquierda del PSOE sigue creciendo, dejando en el aire la viabilidad de un posible reagrupamiento electoral.