Montse Tomé, seleccionadora nacional para la selección de fútbol femenina, ha testificado este lunes en la Audiencia Nacional en el marco del juicio contra Luis Rubiales por su beso con Jennifer Hermoso y las presuntas coacciones posteriores. En su declaración, Tomé ha negado categóricamente haber recibido presiones de Rubiales o Jorge Vilda para dejar fuera de la convocatoria a la jugadora tras los sucesos del Mundial Femenino de 2023.
🤔 Montse Tomé explica los motivos de la no convocatoria de Jenni Hermoso tras el beso con Rubiales
— La Colmena Diario (@LaColmenaDiario) February 10, 2025
🗣️ “Deportivamente no estaba en condiciones”
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«La decisión de no convocar a Jennifer Hermoso fue exclusivamente mía. No hubo ninguna indicación por parte de nadie dentro de la Federación«, ha afirmado Tomé hace escasos minutos ante el juez. Su testimonio pretende desmontar así la teoría de la acusación, que sostiene que la ausencia de Hermoso en la lista fue una represalia encubierta tras su denuncia pública contra Rubiales.
Reacciones
Tomé ha argumentado que su determinación se basó en criterios deportivos y de gestión del grupo, y no en motivos externos. Según su versión, la jugadora «no estaba en condiciones idóneas» para incorporarse en ese momento y prefirió apostar por otras futbolistas. Se ha reafirmado a su vez en las declaraciones que hizo suyas en septiembre de 2023, cuando afirmó que excluir a la jugadora del grupo era su manera de «protegerla de la exposición mediática». Pese a los esfuerzos de su testimonio por conciliar ambas versiones como compatibles, acusación y redes sociales apuntan a la contradicción como prueba de si existieron injerencias externas.
Resumen de las declaraciones de Montse Tomé:
— Andrea Sanchis (@AndreaSanchis_4) February 10, 2025
– No sé quien me nombró como seleccionadora
– No sabía que había un protocolo de acoso sexual
– No sabía que Jenni estaba pasando por eso con el beso
– No la convoqué por motivos deportivos y por protegerla mediaticamente
A su vez, Tomé ha asegurado que no habló con Hermoso sobre el beso de Rubiales ni sobre su situación personal, alegando que en aquel momento desconocía la magnitud del caso. «Mi trabajo es el deportivo y me centré en eso«, sostiene.
El testimonio de la seleccionadora ha sido clave en la jornada, la fiscalía y la acusación particular buscan demostrar que la Federación ejerció presiones y represalias sobre Hermoso y su entorno mientras la RFEF lo desmiente. Las declaraciones que Tomé ha hecho hoy suyas parecen ir en esta línea, pero la opinión pública parece no acabar de estar convencida.
En los próximos días, se espera la declaración de los principales acusados, entre ellos Rubiales, Jorge Vilda, Albert Luque y Rubén Rivera, quienes podrían arrojar más luz sobre las presuntas coacciones que la jugadora habría sufrido tras la final del Mundial.