Esquerra Republicana (ERC) siempre ha mantenido una postura ambivalente en el conflicto israelí-palestino. Por ejemplo, en el Ayuntamiento de Barcelona votaron a favor de romper relaciones con Israel hasta el cese del conflicto armado, mientras que en el Congreso su voto fue negativo.
⚠️ ERC i Junts voten en contra de la «suspensió de les relacions diplomàtiques amb Israel fins que cessi l’ofensiva sobre Gaza i Cisjordània.»
🔴 PP: NO
🔴 PSOE: NO
🔴 VOX: NO
🔴 ERC: NO
🔴 JxC: NO
🔴 PNV: NO
🟢 SUMAR: SI
🟢 BILDU: SI
🟢 PODEMOS: SI pic.twitter.com/gLtcWdBKBN— Jordi Salvia 🍉 (@jordisalvia) February 29, 2024
¿Genocidas o aliados?
Paradójicamente, Rufián, su cabeza visible en Madrid, espetó desde la tribuna en noviembre del año pasado: «En Israel se está cometiendo un genocidio». Estas flagrantes contradicciones, demuestran que la situación en la Franja de Gaza ha sido siempre un escollo para ERC, ya que dentro del partido coexisten dos corrientes: la proisraelí y la propalestina.
Gabriel Rufián da la cara por Belarra y Montero a propósito del genocidio en Palestina y los amigos de 40 y 50 años de Sánchez : pic.twitter.com/2c151JxygQ— IamRGR (@IamRGR1) November 27, 2024
Hipocresía durante el ‘Caso Pegasus‘
Además, añadiendo más agua a un vaso que ya rebosa, hoy ‘El Confidencial’ ha revelado en exclusiva que el expresidente Aragonès compró material de espionaje a Netanyahu, valorado en cinco millones de euros, en 2023. Es decir, desde la Generalitat, mientras tildaban de genocidas a los israelíes, se adquiría su material con el propósito de interceptar llamadas telefónicas.
Curiosamente, toda esta actividad reservada, según informa Antonio Fernández, se produjo mientras los republicanos solicitaban comisiones de investigación sobre el popular Caso Pegasus, lo que plantea serias dudas sobre la transparencia y la coherencia del anterior Ejecutivo catalán