Se cumplen 30 años desde que la banda terrorista ETA asesinó al líder del Partido Popular en Gipuzkoa, Gregorio Ordóñez, mientras comía en un restaurante de San Sebastián con algunos amigos.
Ordóñez, quien consiguió un magnífico resultado al ganar las elecciones europeas de 1994 en la ciudad, fue amenazado por los abertzales en vísperas de las elecciones municipales: «Una declaración más tuya y tu familia corre el riesgo de morir, cualquiera de ellos. Estamos hasta los cojones ya de ti. ¡Fuera de Euskadi!».
El líder popular no cedió y continuó batallando por devolver a la senda democrática al País Vasco: «Lo único que se negocia con ETA es el color de los barrotes». Sin embargo, acabó asesinado.
No obstante, su legado es absolutamente incuestionable e irreductible al paso del tiempo. Su hermana, Consuelo Ordóñez, lo recordó con emoción: «Muchos te mencionan, pero pocos te imitan. ¡Te echo cada vez más de menos!».
#TalDíaComoHoy de 1995 #ETA asesinó a mi hermano Gregorio, fue la única forma de poder callarlo.
Fue una voz libre y hasta un verso libre, mientras le dejaron.
Durante estos 30 años se ha convertido en mi brújula.
Muchos te mencionan pero pocos te imitan.
¡Te echo cada vez… pic.twitter.com/jPdm43zMzr— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) January 23, 2025