El exdirector de Catalunya Ràdio, Saül Gordillo, hoy en El Punt Avui, ha sido condenado por el juzgado de lo Penal 7 de Barcelona a un año de prisión por agredir sexualmente a una trabajadora de El Principal, medio que dirigía y del que fue despedido tras ser denunciado por la víctima. La sentencia incluye, además, dos años de libertad vigilada, y, durante el mismo periodo de tiempo, la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 1.000 metros y la de trabajar con menores.
Gordillo, que también fue director de la ACN, agredió sexualmente a esta trabajadora, que entonces tenía 24 años, en una discoteca de Barcelona tras celebrar la cena de Navidad de El Principal. La sentencia considera probada no solo la agresión sino también que Gordillo pudo llevarla a cabo por ser el jefe de la víctima. El periodista se defendió en el juicio asegurando que la relación había sido consentida.
Consecuencias para la víctima
«Con ánimo de satisfacer su deseo sexual y atentar contra la libertad sexual de la víctima, se acercó de forma furtiva a la joven que estaba pidiendo una consumición en la barra», reza la sentencia, recogida por La Vanguardia, «de modo que no pudiera ver cómo su mano derecha de forma disimulada bajaba por la espalda de ella, le agarró de las nalgas y desplazó la mano buscando su vagina, sin poder alcanzarla de forma directa por impedírselo la ropa que ella portaba». La misma sentencia también confirma que Gordillo intentó de nuevo abusar de la joven: «Con la mano izquierda por debajo del camal del pantalón llegó hasta su vagina y le colocó los dedos entre las medias y el short con intención de masturbarla«.
La víctima, según la sentencia, «ha padecido trastorno por estrés postraumático, presentando angustia, desbordamiento emocional, tristeza aguda, pensamientos intrusivos, dificultades para dormir, alteraciones del hambre e irritabilidad y sentimientos de culpa y vergüenza«.
Saül Gordillo está pendiente de la sentencia por la denuncia presentada por otra empleada de El Principal por hechos similares sucedidos en la misma noche. En este caso, el periodista podría ser condenado hasta a cuatro años de prisión.