En una larga carta publicada en X, el prófugo líder de Junts, Carles Puigdemont, ha responsabilizado a ERC y a su pacto con el PSC de su posible detención si, como se ha comprometido, retorna a Cataluña para la sesión de investidura del socialista Salvador Illa. Puigdemont. «Visto lo que hemos conocido con el escándalo de las campañas de guerra sucia organizadas por ERC, tengo pocas dudas de cómo se alimentó aquella campaña de desprestigio (en referencia a su no investidura de 2017), un patrón que ahora nos encontraríamos con más intensidad», ha asegurado en el escrito, «de la comprensión inicial por el hecho de quedarme unos años en el exilio trabajando y ahorrar la prisión, pasaríamos a una nueva campaña de denigración personal«.
El acuerdo entre republicanos y socialistas significa, según Puigdemont, que la política catalana entra «en una nueva etapa compleja y difícil y requiere que haya organizaciones capaces de devolver la confianza y esperanza a la gente que sueña con una nación libre y próspera». A su juicio, «hay que expulsar las malas artes y la toxicidad con tácticas de beneficios partidistas y nos hemos de dirigir sin subterfugios ni viciadas estrategias de comunicación a toda aquella gente que ha dejado de confiar en la política como vehículo para discutir los problemas y resolver el futuro».
Sin cumplir la Ley de Amnistía
Puigdemont ha asegurado en su misiva que no teme estar en la cárcel porque ya ha sido detenido en estos últimos años en varias ocasiones por culpa del «aparato judicial español». Su detención, ha añadido, será la evidencia de que en España se incumplen las leyes, en referencia a la Ley de Amnistía. También significará que «hay jueces dispuestos a incumplir la ley y que el Gobierno español se lo mira con la indolencia del resignado«. «Hace más ruido que un juez impute a la mujer del presidente y la cite a declarar que cuando el Tribunal Supremo se niega a aplicar la única ley que se ha aprobado en esta legislatura y la única ley de amnistía aprobada desde la entrada en vigor de la Constitución».
No deja realmente claro el líder de Junts si volverá o no a Cataluña arriesgándose a la detención. Pero sí amenaza con que ha llegado el momento de dejar de llorar y de «sacar las garras».
Aquests dies, en previsió de la decisió que ERC va prendre ahir, he estat preparant una carta per fer pública després de conèixer els resultats de la consulta a la militància. Espero que en dispenseu la llargada i que tingueu interès i paciència per llegir-la sense pressa. pic.twitter.com/EiqnV2WOOZ— krls.eth / Carles Puigdemont (@KRLS) August 3, 2024