En su línea de perseguir a aquellas empresas y establecimientos que no empleen el catalán, la Plataforma per la Llengua ha arremetido ahora contra una empresa de alarmas, ADT Alarmas, por este motivo. La entidad ultranacionalista ha publicado un vídeo en el que se escucha a una mujer que, en catalán, exige ser atendida en esta lengua a una operadora que, por su parte, insiste en que no la entiende y que está trabajando desde Madrid. El esperpento alcanza su culmen cuando la misma operadora le recuerda a la clienta catalanohablante que firmó un contrato escrito íntegramente en castellano. Un argumento que la clienta no acepta, mientras sigue insistiendo en su derecho a ser atendida en catalán.
En un comunicado, la Plataforma per la Llengua, entidad fuertemente subvencionada por la Administración catalana y que se hizo conocida por espiar a menores en los patios de los colegios, ha señalado que en lo que va de año ha recibido «más de 200 quejas por discriminaciones lingüísticas en la atención oral de los establecimientos comerciales». En el caso de ADT Alarmas, la plataforma ha asegurado que ha vulnerado el Código de Consumo de Cataluña, así como la Ley de Política Lingüística. El vídeo no tiene desperdicio.
