Escándalo de tintes fúnebres en la Ciudad Condal. Los Mossos d’Esquadra están investigando cinco sepultureros del Cementerio de Montjuic acusados de profanar y robar en al menos 162 tumbas durante el verano de 2003, según relata Crónica Global. Ha sido la propia empresa la que se ha querellado contra los trabajadores después de que uno de ellos tratase de vender varios kilos de joyas en un establecimiento de la cadena Compro Oro cerca de su domicilio. Entra las piezas, figuraban anillas y pendientes, pero también numerosos dientes de oro, lo que despertó las sospechas del dependiente.
A continuación, la policía registró la casa del empleado, lo que resultó decisivo en el avance de la investigación. A los cinco investigados se les tomará declaración el próximo 24 de mayo. En concreto, se trata de una mujer que ocupa un puesto de auxiliar, dos hermanos gemelos y el varón que trató de vender las joyas en la tienda de oro mencionado. Por lo que respecta a la mujer, las sospechas sobre una posible actividad ilícita se despertaron hace tiempo, pues su nivel de vida no se correspondía con el sueldo de un auxiliar como el suyo —entre otras cosas, según fuentes policiales, empezó a acudir al trabajo con un coche «despampanante»—.