La semana pasada, el controvertido expresidente de la Generalitat Jordi Pujol irrumpió en la campaña catalana pidiendo el voto para Junts, argumentando que es «lo más parecido a Convergència». Puigdemont, en una entrevista en Europa Press, ha confesado que se sintió «emocionado» al recibir el respaldo de un «referente político» como Pujol y con una larga trayectoria al servicio de Cataluña. «Que me expresara su apoyo fue un regalo muy bonito, precioso, que le quiero agradecer por lo que representa», ha destacado Puigdemont.
Previamente, en redes sociales, el actual líder de Junts ya había expresado su gratitud por apoyo de Pujol con un textual: «Gracias, presidente Pujol». Asimismo, recordó haber presenciado un mitin del antiguo líder de Convergencia en 1980: «Yo todavía no podía votar, pero me impresionó la fuerza y la determinación para levantar a Catalunya después de la larga noche del franquismo». Pujol, que en la última década ha sufrido un fuerte descrédito público a raíz de haber ocultado al fisco una fortuna en Andorra y cuya familia fue calificada por un juez como «trama mafiosa», aseguró hace unos días que votaría a Puigdemont «sobre todo porque ha dado un apoyo muy fiel y muy generoso a la causa de Cataluña».