El plan nacionalista para que el monolingüismo en catalán reemplace al bilingüismo propio de la sociedad catalana sigue en marcha. Ahora, según cuenta ABC, una campaña lanzada por la Generalitat insta, entre otras peticiones, a que los padres reclamen a los pediatras que se dirijan en catalán a sus hijos —independientemente de la lengua materna de los pequeños o de la del propio pediatra—. La petición forma parte de la iniciativa Probémoslo en catalán. Mucho por hablar, mucho por vivir, impulsada por las consejerías de Educación y Cultura. Ésta incluye una encuesta voluntaria para progenitores que, orientada extender el uso exclusivo del catalán, les pregunta: «¿Con los niños eres un buen ejemplo lingüístico?».
El cuestionario, mediante las supuestas respuestas correctas, recomienda a los padres que hablen siempre en catalán en distintas situaciones —grupos de Whatsapp, con los monitores extraescolares o un reuniones del colegio—. Pero una de las peticiones más llamativas es la referente a la atención pediátrica. Así, ante la pregunta de qué hacer si uno se encuentra con un pediatra que se expresa en castellano, la respuesta correcta es: «Haces ver educadamente a la pediatra que la conversación irá mejor si ella intenta hablar en catalán y los ayudas a los dos (a la facultativa y a tu hijo) a hacer que la comunicación sea fluida». De este modo, se asegura, «haces ver a la doctora que ella también tiene responsabilidades lingüísticas».