No son pocos los que han realizado una lectura del resultado de las elecciones autonómicas gallegas en clave nacional. Y Cataluña no constituye una excepción. Por una parte, el constitucionalismo catalán ha celebrado el triunfo de los populares y que el nacionalismo gallego no se haya abierto camino. Así, por ejemplo, el diputado del PP catalán Nacho Martín Blanco, escribió en su cuenta X tras trascender el resultado: «¡Viva Galicia! ¡Viva España!». Asimismo, reflexionó: «Los mismos que presentaban las elecciones gallegas como un plebiscito sobre el liderazgo de Feijóo se niegan ahora, tras la rotunda victoria del PP, a valorar el histórico descalabro socialista en Galicia como una bofetada de indignación contra la calamitosa política de Sánchez»
A su vez, el vicepresidente de Impulso Ciudadano, Rafael Arenas, ha comentado: «Si no dejas de repetir que los nacionalistas son progresistas, los que se consideran progresistas acaban votando a los nacionalistas. Lo de Galicia es solo el principio». Mientras, las reacciones por parte del nacionalismo se han felicitado por el aumento de votos al nacionalismo gallego.
Valga de muestra la reacción del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès: «Enhorabuena a Bloque Nacionalista Gallego y Ana Pontón por este resultado histórico. Un resultado que refuerza, como nunca, la política valiente y progresista que representa, poniendo a la ciudadanía, sus derechos y libertades a la cabeza. Siempre a su lado. Parabénes e forza!».