No me he reprimido y pese al riesgo de que me cancelen o censuren este artículo sobre la gestión, mejor dicho, sobre la no gestión, del agua, voy a empezar con una reflexión contundente y provocativa, que no debe tomarse de forma literal sino figurativa, y que tomo prestada del perspicaz y profético pensador inglés G. K. Chesterton: “Llegará el día que será preciso desenvainar una espada por afirmar que el pasto es verde”. Pues ese día ha llegado.
Explicar la obviedad de que el clima mediterráneo es tremendamente irregular y que las sequias surgen y resurgen y que luego hay trombas de agua de forma inesperada, y que esto es asi desde hace milenios es considerado anatema y merecedor del fuego eterno, en el cual por cierto no creen. Ya los romanos desarrollaron una magnifica ingeniería hidráulica y construyeron, embalses, acueductos, cisternas, etc. para garantizarse agua a sus ciudades mediterráneas, y lo hicieron tan bien que todavía están muchas de sus obras en pie.
Otra obviedad de las que parece también nos hemos olvidado: sin agua estamos muertos. El agua es una prioridad, de las de la base de la pirámide de Maslow de la jerarquía de las necesidades humanas.
El agua es una prioridad, de las de la base de la pirámide de Maslow de la jerarquía de las necesidades humanas
Sin agua destrozamos la economía, como bien lo anuncia el decreto de restricciones de la sequía (relaciono los cuatro primeros puntos):
- Supresión del riego agrícola en un 80%.
- Reducción del uso del agua para usos ganaderos del 50%.
- Reducción del 25% de los consumos de agua de los usuarios industriales.
- Reducción del consumo de agua en los usos recreativos (25% en usos asimilables a urbanos).
Increíble pero cierto, en 2024 tenemos restricciones en Catalunya que afectan a 6 millones de personas y parece que nos van a traer agua en barco de Sagunto, que todavía es una zona más seca que la nuestra, pero en la que hay una desaladora a medio gas y cerca de un puerto. Desde la última sequía de 2008, no se ha efectuado ninguna de las obras hidráulicas que se precisan y que entonces ya se comentaron como imprescindibles. Recordemos que entonces empezó a llover cuando el conseller de Medio Ambiente y Vivienda de la Generalitat, Francesc Baltasar (ICV-EUiA), admitió que se había encomendado a la Virgen María de Montserrat para que lloviera, pese a ser agnóstico. No nos merecemos lo bien que nos trata la Virgen. Que rápido se olvidaron del lema de San Benito, ora et labora, dejaron de rezar y dejaron de trabajar. A lo que se dice trabajar seguramente no habían hecho nunca. Mencionamos, para no versados en cuestiones monacales o eclesiásticas, que los monjes de la abadía de Montserrat son benedictinos y que la regla de San Benito por la que se rigen alerta mucho sobre la pereza.
Tenemos un gobierno que se preocupa de lo ideológico y superfluo y abandona lo importante y urgente
Lo dijo el exconseller Miro i Ardevol el sábado en la presentación de Corrent Social Cristiana (www.elcorrent.org), un nuevo y necesario laboratorio de ideas, el gobierno ha hecho dejación de funciones (no es cita literal). Tenemos un gobierno que se preocupa de lo ideológico y superfluo y abandona lo importante y urgente. Esto no es gobernar. A la Virgen le debemos pedir no solo que llueva si no sobre todo que nos mande un gobierno de gente sensata y diligente.
Soluciones y tecnología para que no nos falte el agua la hay. Lo que no hay es voluntad de admitir la realidad y ni de aplicar soluciones.
Los embalses de la cuenca del Ebro almacenan a 29 de enero de 2024 5.022 hm3 (64.37%), 47 Hm3 más que la semana anterior, con Mequinenza al 83.54% (1.147hm3), la cuenca Catalunya interna, gestionada por la Agencia Catalana del Agua, dependiente de la Generalitat, embalsa solo 107 Hm3 (15.81%). Para que el agua del Ebro llegue al área metropolitana de Barcelona faltan 65Km de tubería. Pueden consultarse todos los datos en www.embalses.net. En el Ebro hay agua para Barcelona y estaba previsto que llegara a Barcelona. Aguas de Tarragona no consume toda la que tiene concedida.
Necesitamos energía barata para desalar más agua y tenemos que invertir en investigación para optimizar los procesos de desalación
Se sabe desde hace décadas que los recursos actuales no garantizan el agua que precisa el área metropolitana de Barcelona. Con los embalses actuales de la cuenca del Pirineo Oriental, asi se llamaba antaño, las dos desaladoras (Llobregat y Tordera) y el reciclaje de aguas, no da ni dará en el futuro con sequia o sin, al igual que la nieve y el clima del Pirineo Oriental no da para organizar unos Juegos Olímpicos de Invierno. Además, hay que considerar el coste energético de las dos últimas opciones, y el medioambiental, la desalación genera gran cantidad de salmuera como residuo.
Hay que aceptar que el agua que Barcelona necesita está en el Ebro, o en el Ródano o en el Mar, o en los tres sitios a la vez; que hay que interconectar las cuencas, hacer trasvases dicho de forma políticamente incorrecta; que tenemos que evitar las pérdidas de las redes de distribución invirtiendo en una red de telemetría y telecontrol, “Internet of the Things” le llaman ahora; que necesitamos energía barata para desalar más agua y que tenemos que invertir en investigación para optimizar los procesos de desalación.
Sin agua no hay vida ni negocios ni nada de nada. Se puede gestionar mucho mejor el agua, lo explica Lorenzo Correa en su web www.futurodelagua.com y su modelo de gestión seductora del agua. Necesitamos ya más ingeniería y menos política, más colaboración y menos confrontación, focalizarnos en lo que de verdad importa de una vez por todas.