Recientemente, el escritor Javier Cercas, el autor de Soldados de Salamina conocido por oponerse al procés desde posturas progresistas, publicó un artículo en El País criticando la amnistía. Según Cercas, Sánchez había tratado a sus votantes como «papel higiénico» y los «catalanes no secesionistas sobramos en Cataluña y, ahora, en España». El texto le valió un alud de críticas de voces afines al Gobierno, que le tacharon de «derechista» y «facha». Ahora, Cercas ha vuelto a publicar una pieza en El País en el que, bajo el título Un llamamiento a la sumisión, se defiende de las invectivas dirigidas contra él.
En el texto, relata el caso: «Hace poco cuando un escritor de izquierdas osó llamar a la rebelión contra un Gobierno de izquierdas que engañó a sus votantes, empezando por él mismo, y contra el envilecimiento de la política: mientras llovía sobre el díscolo un diluvio difamatorio, destinado a amedrentarlo, los capataces de izquierdas se apresuraron a recordarle que era “un privilegiado” y que su deber consistía en “disolver motivaciones negativas». Y añade: «Claro que sí: es un privilegio que te engañen, y lo que debes hacer, en vez de protestar, es disolver motivaciones negativas, dar la razón al amo y exigir que la gente siga recogiendo algodón». Finalmente, señala que un intelectual que actúa así no es tal, sino que más bien es un «capataz del poder».