Arran, las juventudes de la CUP, es un colectivo controvertido. En los últimos tiempos, por ejemplo, han vandalizado una iglesia declarada como Bien de Interés Cultural en Barcelona, destruido la ofrenda floral de la también ultra Aliança Catalana o saboteado parquímetros en Manresa. En esta línea, el grupo ha publicado en redes sociales un detallado manual sobre cómo ocupar ilegalmente casas y sortear la acción de la Justicia. «Que ni destinando todo nuestro sueldo podríamos permitirnos vivir solos sólo es síntoma de una sociedad cada vez más precarizada. Nuestra recomendación es hacerle frente y poder elegir cómo queremos vivir en un sistema que no nos garantiza ni vida ni salud», justifican.
El documento se divide en cuatro partes. En la primera, se informa de cómo preparar la entrada en la vivienda, que incluye consejos sobre romper ventanas, reventar cerraduras o neutralizar alarmas. En el segundo, detallan como hacer frente a la acción policial, como por ejemplo organizar concentraciones de protesta frente al inmueble para «presionar a los agentes y que desistan». El tercero, por su lado, se centra en los aspectos jurídicos de la ocupación, brindando información a los antisistema para que salgan bienparados de los delitos que cometan. Por último, el cuarto capítulo se centra en consejos prácticos sobre cómo «pinchar» la luz o el agua.