Diversos analistas han señalado que la estrategia del Ejecutivo de Sánchez con el separatismo no es otra que la de la cesión permanente. Y la votación de ayer de los decretos anticrisis, salvada in extremis por Junts per Catalunya, parece confirmarlo —los neoconvergentes se mantuvieron hasta el último momento en el no, para luego ausentarse de la votación y facilitar que el ómnibus saliese adelante—. Así lo ha explicado esta mañana el secretario general de Junts, Jordi Turull, en Catalunya Radio: «Dijimos que votaríamos que no por el fondo y por las formas. Y evidentemente el fondo fue cambiando mucho».
Y es que, según Turull, «nosotros, hasta la intervención misma de Miriam Nogueras, les dijimos: “Escuchen, nosotros, así de esta manera y con este contenido, no lo podemos votar de ninguna manera. El PSOE fue cediendo, cediendo y cediendo. El acuerdo no llegó hasta el último segundo. Hicimos una valoración y nos dijimos: “Dado lo que podemos obtener, nos sale a cuenta hacerlo». Tal vez una de las valoraciones por parte de articulistas constitucionalistas que con más tino han captado la estrategia negociadora del PSOE ha sido la de Alberto Olmos, periodista de El Confidencial: «Curiosa forma de negociar: ceder siempre».