Más concesiones al separatismo por parte de Pedro Sánchez. Tras la reunión que mantuvo ayer el presidente del Gobierno con Pere Aragonès en el Palau de la Generalitat, una de las concesiones otorgadas por el primero al segundo resulta especialmente significativa: la del anuncio de una ley orgánica que de «garantía al plurilingüismo» para «proteger y fomentar las lenguas cooficiales». El anuncio de la medida parece una respuesta a la inquietud generada en el separatismo por el descrédito que ha supuesto para la inmersión la misión de la UE, que ha ratificado la «ausencia de bilingüismo» en la Escola Catalana.
Y es que, tal y como se ha encargado de aclarar Aragonès, de lo que tratará la nueva norma es de «garantizar los derechos lingüísticos de los catalanes en su relación con el Estado y con la Justicia». De esta manera, se centrará en la «preservación del modelo escolar de Cataluña» —que supone la exclusión del castellano como lengua vehicular—, así como al «refuerzo de la presencia del catalán en el ámbito audiovisual». «Tenemos derecho a vivir plenamente en catalán, a la normalización definitiva del catalán y deben ser las instituciones del Estado quienes garanticen los derechos de los catalanes en relación al uso de la lengua propia», aseveró.