Mientras en buena parte de Cataluña y España los ayuntamientos colaboran para que diferentes colectivos de moteros participen en iniciativas solidarias navideñas, en Barcelona el Gobierno de Jaume Collboni no solo no está dispuesto a ello sino que pretende que la Papanoelada Motera de Hospitalet de Llobregat, que se celebrará este domingo, no recorra las calles de la capital catalana como ha hecho en otras ocasiones. Los argumentos son, desde luego, llamativos y ha sido el Síndic de Greuges de Barcelona, David Bondia, el que se ha hecho eco de algunas organizaciones vecinales para mostrar su rechazo a esta original y llamativa caravana de moteros vestidos de Papá Noel.
Bondia ha reclamado al Gobierno de Collboni «medidas cautelares» para evitar que los motoristas recorran las calles de Barcelona en base a criterios de salud y medioambientales. Recoge así las críticas de entidades como Eixample Respira, que considera que la Papanoelada afecta a la salud de los ciudadanos que residen en su recorrido. Por ello ha organizado una protesta para el domingo con el fin de cortar las calles por las que podrían desplazarse los participantes.
Bicis sí, motos no
No son los únicos. Tampoco gusta a la entidad Barna en Bici que los moteros navideños puedan ser protagonistas del domingo barcelonés porque consideran que su recorrido por la ciudad es «una ruta de humo y ruido» ante la que exigen la actuación de la Guardia Urbana.
Sin autorización
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que la Papanoelada no tiene «ningún tipo de permiso» municipal para recorrer las calles de la ciudad. Y ha advertido a los moteros de que, en caso de hacerlo, serán sancionados. Así lo ha asegurado el concejal del Eixample, Jordi Valls, quien ha indicado este viernes que el Ayuntamiento «no ha recibido ninguna comunicación por parte del Departamento de Interior de que haya sido convocada ninguna marcha en Barcelona», según recoge Betevé. Valls ha dejado claro que la Guardia Urbana «velará porque no haya incidentes de tránsito» y que «levantará actas» en caso de que los moteros desfilen por la ciudad.