Las investigaciones del procés y la inminente amnistía pactada por el PSOE con el separatismo vuelven a chocar. El jueves, el mismo día que los socialistas y republicanos llegaron a su polémico acuerdo para la investidura —que incluye la condonación de 15.000 millones de deuda catalana y ampliar la amnistía a los CDR y Tsunami Democràtic—, la Guardia Civil ha entregado un informe en el que concluye que la secretaria general de Esquerra, Marta Rovira, «realizó cometidos de coordinación del movimiento Tsunami Democràtic en lo relativo a la búsqueda de apoyos institucionales y de su partido político» para el citado movimiento. Cabe recordar que éste buscaba poner en jaque al Estado mediante acciones violentas, cuyo destrozos costaron 2,8 millones de euros.
En concreto, los agentes identifican a Rovira, procesada en el Tribunal Supremo y huida en Suiza, con el usuario Matagalls. El sobrenombre aparece en varias conversaciones telefónicas, de las cuales se trasluce que «participa en el reclutamiento de gente» y «ejerce de enlace entre Tsunami y la dirección. En la plataforma, que se hacía pasar por un movimiento civil espontáneo pero que escondía una «estructura creada adhoc y llevaba gestándose un año antes de actuar, también participaron Oriol Soler, Xavier Vendrell —exmilitante de Terra Lliure y exsecretario de Organización de ERC—, Marta Molina, Josep Capmajó, Jesús Rodríguez Sellés, Jaume Cabani, Rubén Wagensberg y Oleguer Serra. Sus acciones de protesta ante la sentencia del procés se saldaron con 200 detenidos.