El Consell de la República, la asociación con la que Carles Puigdemont tutela desde Waterloo a Junts, se ha pronunciado este martes totalmente en contra de que los partidos separatistas apoyen la investidura del socialista Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. De las 90.484 personas con derecho a voto, solo han ejercido este 4.021 y lo han hecho para decir mayoritariamente que no quieren que el separatismo sea uno de los apoyos del PSOE para mantenerse en el Gobierno.
El 74,9% de los votos ha sido a favor de «promover el bloqueo a la investidura del presidente del Estado español por parte de los partidos independentistas catalanes«. El 24,9% ha votado no y solo un 0,2% lo ha hecho en blanco. Las votaciones se han llevado a cabo de forma telemática, a través de la app del Consell y de la web, entre el 17 y el 23 de octubre.
El resultado de esta consulta no es vinculante ni para Junts ni para ERC. Sin embargo, deja a Carles Puigdemont en una difícil situación. Si, a pesar de esto, decide apoyar la investidura de Sánchez, perderá el crédito que ha logrado recuperar entre los independentistas desde las elecciones generales del pasado mes de julio. Un crédito que bien podría ayudar a que Junts recuperara, a su vez, el dominio del separatismo catalán, ahora en manos de ERC. Si Puigdemont, por el contrario, atiende a lo que le han pedido los miembros de su entidad, obligará a convocar unas nuevas elecciones generales de resultados muy inciertos tanto para Junts como para los republicanos.