Diferentes grupos radicales de Barcelona han colgado este sábado la bandera de Palestina en el Hotel Cortes, ubicado en el centro de la capital catalana y propiedad del magnate del petróleo israelí Haim Tsuff. El establecimiento es el segundo hotel de Tsuff en España y fue abierto recientemente, tras la remodelación de sus 44 habitaciones. Los asaltantes han explicado en un comunicado que Tsuff está «implicado en el complejo industrial-militar de Israel» como argumento para la ocupación.
En el mismo comunicado han indicado que su objetivo es «señalar el patrimonio levantado sobre la expulsión de los vecinos y la colonización de Palestina». «Nos lo reapropiamos hoy por la causa palestina«, han añadido, haciendo, además, «una llamada a la acción directa contra los intereses económicos del régimen israelí hasta que la perpetración de crímenes contra la humanidad le salga demasiado cara».
La CUP ha mostrado en su perfil de X (Twitter) su total respaldo a la acción. Lo ha hecho con un mensaje en el que ha asegurado que los cupaires están «con los palestinos» y empleando un lema controvertido porque encierra el mensaje de que Israel debe ser destruido: «Desde el río hasta el mar«.
Nazis de ayer y hoy
Lo sucedido ha merecido la recriminación de políticos como el diputado autonómico de Junts Francesc de Dalmases, que en un mensaje publicado en X (antes Twitter) ha afirmado que el activismo político debe realizarse «en el terreno de juego que marcan los principios democráticos esenciales». «La idea de realizar acciones que llenan de satisfacción a los nazis de ayer y hoy y que recuerdan las peores imágenes de Europa», ha añadido, «es horrorosa».