El lenguaje inclusivo sigue perdiendo adeptos. Hace dos años, Francia anunció que lo vetaba en la Educación Nacional porque, según el ministro de Educación, «constituye un obstáculo a la compresión de la escritura». Ahora, en España, es la Universidad de Barcelona la que ha firmado una instrucción en la que la institución renuncia a este lengua y decide regresar al genero gramatical masculino como neutro genérico. El motivo es que, según la instrucción, la «eficacia normativa y la seguridad jurídica propias de reglamentos, instrucciones, protocolos de cumplimiento obligato y otras normas exigen una redacción clara, concisa y precisa y entendedora».
Asimismo, el texto, fechado en julio, señala que «conviene recordar que desde el punto de vista lingüístico, el uso del masculino como género gramatical no marcado no excluye ni a las mujeres ni a las personas no binarias».
La miembro de Universitaris per la Convivencia, Isabel Alonso, ha celebrado la noticia: «Es un avance. Ahora a ver si nos animamos a configurar los tribunales teniendo en cuenta la especialidad de las personas antes que su género». Por el contrario, la Asamblea Feminista de la UB ha cargado contra la medida: «La UB ha publicado una instrucción por la cual volvemos a utilizar el masculina como genérico-neutro. ¿Cómo puede ser? La universidad debe rectificar inmediatamente esta instrucción. ¡Plantaremos cara! ¡Ni un paso atrás!».