El Tribunal Administrativo del Deporte ha tomado la decisión de abrir expediente al presidente suspendido de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por el beso no consentido a la jugadora de la Selección Jenni Hermoso. El TAD considera que este hecho se trata de una falta grave, lo que significa que el Consejo Superior de Deportes (CSD) no podrá destituir a Rubiales al frente de la RFEF.
Según recogen diversos medios, la decisión del TAD podría conllevar que Rubiales recibiera una sanción de entre un mes y dos años de inhabilitación. Nada que ver con lo que podría suceder si el tribunal hubiera calificado la falta como muy grave, que conlleva una inhabilitación de entre dos y 15 años. Rubiales, de momento, ha sido suspendido por la FIFA como presidente de la RFEF y tampoco puede acercarse a la jugadora. Hermoso, por su parte, aún no ha acudido a la Fiscalía para presentar la denuncia contra el presidente suspendido de la real federación.
El Consejo Superior de Deportes, presidido por el socialista Víctor Franco, presentó la denuncia ante el TAD el pasado viernes. El Gobierno esperaba que el tribunal se pronunciara el lunes sobre la misma. Sin embargo, la entidad pidió más documentación para poder tomar una decisión. El CSD acusó a Rubiales de incumplir 76.1.a de la Ley del Deporte, que se refiere al abuso de autoridad. También acusó al presidente de la RFEF de haber incumplido el artículo 14.H del Real Decreto 1591/1992 de Disciplina Deportiva, que sanciona «los actos notorios o públicos que atenten contra la dignidad o el decoro deportivos», según recoge El Nacional.