Debo reconocer que después de más de 40 años de matrimonio político fiel, llevo un quinquenio de total promiscuidad. Militante socialista desde 1974, Convergencia socialista primero, PSC-C después y, finalmente PSC, dejé de serlo con la llegada de Pedro Sánchez a la secretaría general. Su intervención durante la campaña interna en la calle Nicaragua, antigua sede del PSC, me convenció de darme de baja. Estatalismo y sumisión al nacionalismo fueron las razones. Después los excesos despiertos me acabaron de convencer. Hasta entonces siempre había votado socialista.
Liberado del matrimonio, lejos de buscar una nueva relación política estable, he ido votando según la coyuntura política de cada elección. Ciudadanos en las autonómicas de 2017 porque parar el golpismo independentista era la prioridad. Repetí con C’s en las dos convocatorias de elecciones generales de 2019 por la ilusión de consolidar en España una opción de centro-liberal. Voté a Salvador Illa en las autonómicas de 2021, por el perfil personal del candidato y por ser la única alternativa con opciones frente al independentismo. Por último, a SOM ,un partido local de Castelldefels, en las municipales por la figura del cabeza de lista.
Y ahora ¿qué y porqué? Votaré por primera vez en mi vida al PP. Como muchos otros votantes, más contra Sánchez que a favor de Feijóo. Considero que el líder popular será un buen gobernante si el resultado de las elecciones le deja margen para hacerlo con autonomía suficiente, como ha demostrado en Galicia. Respecto a VOX, no tengo la menor intención de votarles y espero que no gobierne. No obstante, debo decir que aunque sus posiciones son muchas veces demasiado radicales y algunos de sus dirigentes ultra-conservadores, su función de cuestionar el wokismo es, sin duda, útil para frenar los excesos del populismo de izquierdas.
Ya ven, pura promiscuidad política. Y me parece que cada vez son más las personas que han dejado de lado su fidelidad eterna a unas siglas y votan en función de los candidatos y los problemas que se plantean en cada elección.
Tu artículo lo podríamos haber firmado muchos que nos encontramos en la misma tesitura.